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Ágil y veloz Colibrí: Su aparición en 1968 supuso el apoyo a su hermano deportivo de alta cilindrada VA Kosmos, puesto que el Pelícano no satisfizo el segmento para el que fue proyectado, pasando a ser el acompañante del Ifigenia por aquellos años, hasta bien entrados los setenta. El Colibrí, accesible para un amplio sector de la población, sobre todo aquella más jóven, incluía versiones Prixet, Prixeter, GT y Arkal, siendo esta última una derivasión de las series "T", adaptando motores de enorme potencia en una célula pequeña y muy ligera. Si bien su aceptación fue grande, las aspiraciones deportivas apuntaban siempre al Meteor, de tamaño algo mayor, pero de prestaciones vertiginosas y mejor equilibradas. Naturalmente que hasta ese momento el fenómeno Anaconda no existía, y si bien su aparición no desplazó al Colibrí, presentó una plataforma sumamente versátil que se adaptó a todo tipo de competiciones como ningún otro modelo VA logró hacerlo.